El Chapo, Dámaso López, La Mataviejitas: atrapada en la mente de los criminales
Sobre las paredes de su guarida cuelgan algunas fotos de cabezas cercenadas, cuerpos abiertos en canal, cicatrices de estrangulamiento y retratos de capos conectados unos con otros por flechas, mapas, cuerdas y chinchetas que configuran de un solo vistazo el mapa criminal de México. Del salón a la cocina, pasillos y despacho incluido. El único espacio de la casa de Mónica Ramírez Cano que no parece un búnker es el baño. Esta psicóloga criminal, de 44 años, que ha pasado meses analizando la mente de los grandes capos de la droga como Joaquín El Chapo Guzmán o Dámaso López El Licenciado, y otros que todavía no puede nombrar además de un centenar de asesinos en serie, se siente más cómoda entre estas imágenes que frente a un gin-tonic con sus amigas. El verdadero mapa y lo que él esconde lo lleva todos los días en su cabeza.