Le encontraron el talón de Aquiles
No hay ruido pequeño que no se haga grande, ni grande que no se convierta en problema. O por descuido o por frecuencia.
Los nihilistas del patio creen haber encontrado el talón de Aquiles al gobierno del cambio. La comunicación política, la estrategia de información.
Como es lógico, golpean la barriga sosa, a falta de torso de cuadritos, y no solo en las redes. También la prensa formal advierte la situación y no puede evadirla.
El presidente hace su trabajo y no rehúye periodistas, y cada pregunta obtiene respuesta. Tal vez no sea la que se quiere, pero es la suya.
Los funcionarios no actúan de igual manera, y se ocupan más del figureo que de aclarar o avenirse al contexto. Eso de rueda de prensa sin pregunta es una provocación.
Como si los medios no fueran inquisitivos, sino testigos de piedra.
Los cien millones de pesos a los artistas siguen dando vueltas porque el jefe del gabinete social se negó a contestar.
Dijo que en el comunicado estaba todo, lo que no era cierto. O peor todavía: fue soplo de aire que avivó la llama.
Si el documento era suficiente, ¿a qué entonces comparecer ? Ante fallas evidentes, la humildad se impone.