Truffa, la vegetación dominicana sobre la mesa
Cuando Vanessa Valdés estaba buscando la forma idónea para sus propios servilleteros, solo tuvo que mirar alrededor: en el Caribe, con su privilegiada vegetación, el verde es parte del entorno aun en sus puntos urbanos. De esa inspiración desde el follaje tropical nacieron los Truffa, unos porta-servilletas hechos totalmente a mano en Dominicana, con hilos reciclados y anillos en guayacán.
Valdés, de padre dominicano y madre venezolana, tenía varios años buscando una punta de lanza para emprender creativamente. Con el pico de la pandemia, que nos trancó a todos en casa, vio una oportunidad: a falta de restaurantes y eventos, la gente estaba buscando engalanar sus comidas cotidianas. De ahí pensó en trabajar un objeto artesanal para la mesa, fácilmente replicable en distintos colores. Las Truffas, que desde su creación en marzo de 2021 ya se han expandido con una amplia paleta cromática, fueron la solución. El hilo, de origen español y que compra a un intermediario local, es una mezcla reciclada que contiene 65 por ciento algodón, 25 por ciento poliéster y el resto de otras fibras. El guayacán es trabajado por un ebanista en Juan Dolio, convirtiéndolo en los anillos para las servilletas. Las hojas son formadas por una artesana en Santo Domingo, especializada en macramé. “No hay nada plástico ni industrial en estos servilleteros”, explicó Valdés. “Ahí solo hay una muestra de la fuerza que tenemos al unirnos, para darle una mano a nuestros artesanos talentosos que no han tenido la oportunidad de exponer su trabajo”.
Las truffitas han traspasado las fronteras locales: en la cuenta de Instagram de la marca, Valdés recibe con frecuencia peticiones de compra desde el extranjero. Por eso está trabajando en una tienda online, aunque reconoce que la traba más notable para la exportación de sus productos es la falta de opciones de envío a un precio justo. “Ya tengo un buen suplidor para los envíos nacionales, pero sacar las mercancías del país es costoso”, afirmó la diseñadora. “Y yo tengo este producto hoy pero tengo cinco más en la cabeza. Espero poder encontrar una solución adecuada para que así también pueda crecer mi mercado”.
Contenido original de Design Week RD.
Fotos: Kristina Kasic
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