Higiene en la cocina: errores con consecuencias
En la cocina se dan errores comunes de higiene que pueden parecer inofensivos pero que pueden tener consecuencias leves, moderadas y graves para tu salud ¡Toma nota!
Lavar el pollo en la pileta: en primer lugar, no deberías lavar el pollo. Al ponerlo en la pileta y lavarlo, con el agua salpicas todo lo que está cerca y contaminas las superficies. La mejor manera de eliminar las bacterias es con el proceso de cocción, sin lavado previo.
Lavas sólo los vegetales que se comen crudos: a diferencia del pollo, los vegetales si debes lavarlos previamente a manipularlos, ya sea que los comes crudos o los lleves a cocinar. Lo ideal es no sólo lavarlos, sino sumergirlos en un recipiente que tenga una mezcla de agua y lavandina durante unos 15 minutos.
No te lavas las manos: antes de manipular cualquier alimento, incluso antes de manipularlos para lavarlos, debes lavarte las manos. Los patógenos que están en tus uñas pueden pasar a la comida en lo que se conoce como contaminación cruzada.
Usas los mismos utensilios: nuevamente, para evitar la contaminación cruzada, no debes usar el mismo cuchillo con el que cortaste la carne cruda para rebanar otro alimento.
No limpiar la heladera: debes lavar la heladera al menos una o dos veces al año. Hablamos de una limpieza profunda, luego de desenchufarla y vaciarla de todos sus alimentos.
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